Frank Correa
Carilda Montalba, de 53 años y vecina del municipio Playa denuncia el pésimo estado en que se encuentra el hospital Clínico-Quirúrgico de 26, Joaquín Albarrán, donde hace un mes tiene ingresado a su padre en la sala de cuidados intensivos.
Ingresó con síntomas de deshidratación y cuadro febril, en un cubículo con cuatro camas, junto a tres pacientes con infección de bacterias altamente resistentes a los antibióticos. En la sala las condiciones higiénico-sanitarias son pésimas. El instrumental para tratar a los pacientes no es personal, se utiliza una sola jeringuilla con la que pasan los alimentos a los cuatro por el lebín.
La familia ha tenido que llevar sábanas, cubos, ventiladores, jeringuillas, hasta tenedores para pasar el oxigeno. Existen todo tipo de insectos en los pasillos llenos de agua. Los elevadores están oscuros y sin ascensoristas. El trato de los custodios a los familiares también es pésimo.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario